Según la Wikipedia, una idea es una imagen que existe o se halla en la mente. La capacidad humana de contemplar ideas está asociada a la capacidad de razonamiento, autorreflexión, la creatividad y la habilidad de adquirir y aplicar el intelecto. Las ideas dan lugar a los conceptos, los cuales son la base de cualquier tipo de conocimiento, tanto científico como filosófico.
A partir de esta definición y después de ver el video de Steven Johnson «Where good ideas come from«, he querido hacer un pequeño resumen sobre el tema:
¿Cómo surgen las buenas ideas?
Cuando hablamos de tener una idea, automáticamente pensamos en el «eureka», o al hecho de tener una proyección en tu cabeza de repente. Como la manzana que le cayó a Newton y le inspiró para desarrollar la teoría de la gravedad. No obstante, parece que las ideas surgen de otro modo. Tomamos ideas de otras personas que hemos conocido, que nos encontramos en los cafés, en las conversaciones con amigos, los entretejemos todas juntas en nuevas formas y creamos una nueva. Así es como surge la innovación. Las reuniones de personas con diferentes backgrounds, diferentes aptitudes, distintas procedencias y predispuestas a confluencias nuevas, interesantes e impredecibles, resulta ser el caldo de cultivo más propicio a la innovación.
Según Steven Johnson:
Casi todas las ideas surgen de las reuniones semanales o en las reuniones con amigos o compañeros, cuando todos se reúnen para compartir conocimientos y descubrimientos y no realizando su trabajo.
Incubación de las ideas.
Muchas de las grandes ideas han tenido un periodo grande de incubación. Surge una idea, una innovación, pero todavía no se tienen las herramientas adecuadas para desarrollarla. Darwin es un ejemplo de ello. De repente se le ocurre el algoritmo mágico de selección natural, pero publica su descubrimiento mucho tiempo después (se han descubierto apuntes que demuestran que Darwin tenía la idea de selección natural muchos meses antes de que se publicara). Tenía la idea, pero no podía desarrollarlo todavía. No puedes decirle al jefe. “tengo una excelente idea, pero no será útil hasta 2020”.
Entonces, si no puedo desarrollar mi idea por no tener las herramientas adecuadas para hacerlo, ¿qué se puede hacer?.
Ideas colaborativas.
Si todas esas corazonadas se conectan y están en un ambiente adecuado, uno puede desarrollar la mitad de la idea y otro a partir de ésta, desarrollar la otra mitad. Valorando el principio de conexión de ideas y no el principio de protección. Esto implicaría un avance significativo en la ciencia, la medicina o en la política . Estoy seguro que existen multitud de ideas de científicos que no publican ni comparten, hasta que no son capaces de materializarlas. Y eso, como hemos visto, puede significar mucho tiempo: meses o incluso años en ver la luz.
Me imagino una red donde todos los científicos del mundo pudieran interconectar sus ideas y conocimientos a través de redes colaborativas (tipo Wikipedia) e ir compartiendo entre ellos sus últimos descubrimientos e ideas para combatir el Cáncer, Alzheimer, descubrimientos de energías alternativas al petróleo, etc. seguro que se avanzaría mucho más y se tardaría menos en lograr sus objetivos.
Qué buena reflexión. Es verdad que la creatividad se construye muchas veces hablando con otros. Me acuerdo de una cita de nosequién que decía «cómo voy a saber lo que pienso, si aún no lo he dicho». Y no es ninguna exageración. El pensamiento funciona de tal manera que muchas veces construimos nuestra propia opinión mientras la estamos expresando.
igual que la dialéctica griega antigua, sobre el conocimiento y las ideas.
Felicidades por la foto!