Llegar a la cima del Yelmo en La Pedriza (1718 metros) es un momento mágico que te hace descubrir nuevas sensaciones. Un momento donde no importa el esfuerzo que te ha costado llegar hasta allí y donde puedes llegar a tocar el cielo con tus manos. Llegamos hasta allí pasando por el corredor del miedo o chimenea de la cara norte un lugar que las personas que son montañeros experimentados como es mi caso, intimida un poco y da mucho respeto.
Fotografia tomada justo en la cima del Yelmo de la Pedriza
En la foto mi amigo Marcos disfrutando de un momento irrepetible después de subir al punto más alto del Yelmo en la Sierra de Guadarrama.
La chimenea de la cara Norte
Es curioso que justamente antes de ascender al Yelmo hay una parte, increíblemente estrecha y angustiosa, que llaman la chimenea de la cara norte y que es el paso obligatorio justo antes de llegar a la cumbre, en la que tienes que subir de lado y con mucha habilidad. Yo llevaba la cámara en la mochila y no entraba con ella. Tuve que ingeniármelas para poder subirla sin sufrir ningún daño.
Os puedo asegurar que no es nada fácil pasar por la grieta de la roca como para encima tener una mochila con la cámara fotográfica, que en mi caso al ser una cámara réflex no tiene un tamaño manejable y tiene un peso considerable. Recomiendo ir con una cámara de fotos más pequeña y manejable o directamente llevar el móvil. No obstante, mereció la pena por ver y poder fotografiar las vistas que se pueden disfrutar desde allí.
La ruta completa en el Blog de la Pedriza
Tenéis la descripción completa de la ruta que hicimos en el blog de La Pedriza donde vienen detallado todo el recorrido e incluye un montón de fotografías por si os apetece subir o al menos disfrutar de la pradera que hay abajo antes de subir a la cima.